A pesar de que las tortugas marinas tienden a vivir en aguas cálidas, los cambios climáticos afectan su hábitat natural. Este es el resultado del calentamiento global y las actividades de los humanos. Muchos elementos deben ser explorados para comprender cómo el cambio climático les afecta.
Las tortugas marinas son animales muy tímidos y no les va bien con el estrés. El no ser capaz de encontrar lo suficiente para comer será estresante para ellos, la falta de alimentos puede deberse al cambio climático debido al efecto de ondulación. Por ejemplo, como las aguas se calientan demasiado muchas de las plantas y los animales que las tortugas consumen se harán menos abundantes. Y tendrán que salir de su hábitat natural en busca de nuevas formas de alimentación.
De cualquier manera, estos eventos resultan muy estresantes para las tortugas marina, y pueden evitar que tomen parte en el proceso de apareamiento. Si no se aparean, se reducirá el número de huevos que se pondrán en las zonas de nidación. Sólo el 10% de las crías sobreviven el primer año de vida. Además esta el factor de que el cambio climático atrae a más animales de tierra en busca de crías para consumir como alimento, debido a que sus fuentes de otros alimentos se vuelven escasas. Se puede ver cómo se pone el futuro de las tortugas en grave peligro.
A la vez las tortugas marinas más grandes se convertirán en fuente de alimentación común para tiburones y ballenas, aunque siempre lo han sido para los tiburones tigre, casi todas las especies de tiburones y ballenas prefieren otras fuentes de alimentos. Sin embargo, ellos no van a dejar pasar la oportunidad de una comida de tortugas cuando escasee el alimento.
Las altas temperaturas también pueden hacer que sea extremadamente difícil para las crías sobrevivir a medida que hacen la transición de la tierra al agua. La arena puede llegar a estar muy caliente y mueren durante el proceso, lo que significa que no tendrán ninguna posibilidad en absoluto de ayudar a aumentar el número total de tortugas marinas existentes.
El clima se cree que afecta al sexo de las crías. Así que, si las temperaturas siguen aumentando de manera significativa, se cree que habrá muchas más hembras que machos en el mundo. Los machos probablemente no serán capaces de mantenerse al día con las necesidades de las hembras en la reproducción. Hay investigaciones que muestran que las crías pueden morir cuando aún están en sus huevos debido a las temperaturas extremadamente calientes en algunas áreas. La arena ayuda a mantenerlos frescos, pero si el clima sigue cambiando, no habrá nada que se pueda hacer.
Muchas teorías por ahí tienen un panorama sombrío. Entre ellos, se encuentra la posibilidad de que el cambio climático pueda alterar la capacidad natural que tienen las tortugas marinas para migrar y reproducirse. Algunos investigadores estiman que todas las tortugas marinas que quedan en el mundo podrían extinguirse en los próximos 50 años. Ellos creen que gran cantidad de culpa tiene que ver con el calentamiento global y los cambios climáticos.
No se trata sólo de que las tortugas marinas se ven afectadas por el cambio climático, cada animal, incluido el ser humano está afectado. Es por ello que la comprensión acerca calentamiento global y la adopción de medidas para evitarlo son necesarias, y ayudarán a asegurar que las tortugas y otras criaturas sean capaces de beneficiarse de lo que queda de sus ambientes naturales.